TANGRAM Prevenciķ i tractament del Fracās Escolar

 


"Dormir bien condiciona el rendimiento escolar"


Dormir unas 10h diarias es indispensable para aprender, pero no siempre es fácil conseguir que los hijos vayan a dormir pronto. Los niños esgrimen toda una serie de razones bien pensadas, pero nosotros tenemos que saber que se reducen a:

¨ Quieren quedarse solos con sus padres un rato, sin la competencia de los hermanos.
¨ Tienen miedo.

La primera razón es de fácil solución, es suficiente con encontrar algún rato en el cual podamos dedicar cierta exclusividad al hijo y si esto ya lo hacemos, hay que ser estrictos, ya que algunos niños quieren ser los protagonistas de la vida familiar y no dejar que padre y madre tengan relación de pareja.
El segundo motivo es más delicado. Podemos considerar como proceso natural de cualquier niño los miedos nocturnos alrededor de los 4 - 6 años y la actitud más adecuada es no exagerarlos, mostrando a la vez comprensión: dejar una luz encendida, explicar un cuento antes de dormir, atenderlo cuando se despierta y hablar con él de sus "monstruos". Una actitud demasiado protectora puede provocar la instalación definitiva del miedo, pues no deja que el niño encuentre estrategias propias para luchar contra sus monstruos. Esto se refleja en su rendimiento escolar, pues no descansa bien y no sabe afrontar las pequeñas dificultades que surgen ante el aprendizaje escolar.

Rosa López Calull
Maestra, psicoanalista y pintora


PUBLICADO EL MES DE NOVIEMBRE DE 2003 EN LA REVISTA "3VILES"